La Juventud y la Política

Una mirada profunda de la importancia del involucrarse en cuestiones políticas como jóvenes.

El día a día nos involucra en cuestiones determinantes a nuestro futuro y el de nuestra generación, nos permite desarrollarnos en ámbitos como la formación académica, laboral, deportiva o desde diversos espacios de desenvolvimiento social. A la par de ello, una cuestión casi omnipresente, que siempre esta ahí, determinante de nuestras vidas, que nos envuelve sin quererlo o tal vez de manera voluntaria, tan odiada por algunos o tan amadas por otros, estamos hablando de la mismísima Política.

¿CUÁL ES NUESTRO ROL COMO JÓVENES?

Muchas veces es nuestra generación subestimada por carecer de determinadas cuestiones y vivencias de las anteriores que nos anteceden. Atacada por una presunta inexperiencia, por haber sobrevivido y avanzar como adolescentes y adultos en una democracia ya asentada, poco madura por cierto, pero democracia al fin, con la importancia y el llamado de defenderla desde su retorno en nuestro país en el año 1983.

Allí, en esa supuesta “inexperiencia” surge una gran responsabilidad y un rol más que importante, ese que subyace en una mera catarsis del desenvolvimiento que debemos tener en la Política, de los canales, de los debates y de los proyectos comunes, sin distinción de espacio o ideologías políticas, con un fin común, el generar un cambio positivo y maduro para nuestra Argentina. Más allá de ese desencanto actual del ámbito político y de los actores actuales de la misma. Ya que las decisiones y la participación cada día se refleja más en aquella franja etaria que hoy abarca entre los 16 y 30 años de edad.

Ese Rol debe ser activo, de formación y con profunda vocación de enriquecimiento, de un enriquecimiento que aporte a la sociedad y que nos aporte cambios significativos como individuos, como ciudadanos y como sujetos políticos activos.

¿CUÁL ES NUESTRO LUGAR COMO JÓVENES Y LA INFLUENCIA EN LA POLÍTICA?

El Rol de nuestra juventud es cada día más determinante en la agenda política, la participación demandante crece y la realidad lo exige. La juventud impone discusiones, obliga a adaptarse a nuevos medios de comunicación y redes sociales, exige debates serios y a la producción de cada día a una autocritica más grande como sociedad y como personas, corrigiendo errores y marcando falencias en la manera de relacionarnos con el de al lado.

Cuando hablamos de números y cantidad en la población empezamos a observar porque la Política hace énfasis en la juventud y es determinante en los procesos electorales.

En Argentina, la franja etaria de potenciales votantes entre 16 a 17 años abarca el 2,60% del Padrón Electoral, mientras que en la franja de 18 a 30 años abarca más del 31% del Electorado, sumando otro 22% que no supera los 40 años de edad.

De esta manera, el número significativo llama al deber de ser canalizado en representaciones, en participación y sobre todas las cuestiones en una madurez política en general a trabajar cotidianamente. Que la misma mueva a las nuevas generaciones, que marque una agenda seria, significativa y así una participación masiva de los jóvenes en ella. Como objetivo a alcanzar, generar un país mejor em nuestro futuro, con expectativas, con posibilidades de progreso, sin distinción y con banderas que lleven a la tan amada u odiada Política a corregir los problemas que cada día nos aquejan como argentinos.