Historia de Pablo Besson y su lucha por los derechos civiles.
Es conocido que los argentinos tenemos problemas de memoria graves, olvidamos lo importante y recordamos verdades que a veces carecen de ellas.
Hoy gozamos de cosas, que parecen básicas y hasta ordinarias, que en un pasado no existían, o al menos no para todos.
Un pasado en donde la sociedad argentina transmitió un mensaje claro: “ si no sos catolico, no te cases, no nazcas y tampoco mueras”. Está la historia de los sin nombre, de los no personas, de los sin derechos y la lucha de un hombre valiente que transformó la historia.
Todos sabemos que desde que Argentina se organizó como estado, en 1862, el país recibió millones de inmigrantes europeos con la promesa de una mejor vida.
Sin embargo, como en el día de hoy, a veces las promesas de nuestros gobernantes terminan siendo un poco diferentes a la realidad.
Con una de estas crudas realidades se encontraron los padres de la joven Luisa Engler en 1881 cuando quisieron enterrar a su hija en el cementerio municipal de Esperanza, Santa Fe.
Si bien la constitución aseguraba la libertad de culto, esta era interpretada de manera sesgada, por lo que a la evangélica familia Engler no solo se les prohibió enterrar a su hija en el cementerio municipal por ser considerados “herejes”, sino que además fueron denunciados penalmente por enterrar a la misma en la quinta familiar.
Esta situación de completa injusticia, fue la que despertó al pastor bautista de origen suizo Pablo Besson, quien seria una pieza fundamental por la lucha de los derechos civiles. Luego de la muerte de Luisa, Besson publico notas en los principales de Santa Fe denunciando este hecho que el consideraba inconstitucional.
En El Diarito de Santa Fe refiriéndose Besson la situación que atravesaban a los protestantes, escribió :
“Están tolerados , simplemente tolerados , como las langostas , los bichos feos , los malos gobiernos o las casas de prostitución . Mientras se les concede a las órdenes monásticas todos los favores y subvenciones del Estado , se niega a los protestantes el derecho de nacer y de morir civilmente . En la provincia de Santa Fe, sin ser rebeldes contra la autoridad , protestamos contra tal inquisición”
No solo con conocimientos teológicos, este joven pastor además contaba con un manejo de leyes argentinas digno de un jurista destacado, lo que permitió dejar al gobierno en una situación incomoda con sus notas.
Por ejemplo citando el artículo 4 de la Constitución Besson escribe : “Esta libertad no es una mera concesión ni una simple tolerancia de los cultos opuestos al nacional , a fin de facilitar la inmigración de todos los hombres del mundo que quieran habitar en nuestro suelo . La tolerancia siempre es revocable en tanto que es un favor , pero en cambio , la libertad es un derecho constitucional “… ” Sin desconocer a la religión su acción , su influencia en la sociedad , no podemos tomarla por institución del Estado ; la nacionalidad argentina no puede fundarse , ni asimilar los elementos heterogéneos y cosmopolitas sino sobre la base del estado laico , del derecho común , del poder civil que representa el derecho de cada uno y la justicia para todos.”
La campaña iniciada favor de la creación del Registro Civil , de la supresión del Patronato Eclesiástico , de la Separación de la Iglesia y el Estado y de la Secularización de los Cementerios , hizo comprender a Besson la importancia de estar en la Capital Federal y por esa razón no tardó en radicarse en Buenos Aires.
Fundando el primer edificio de la iglesia bautista en Buenos Aires predicando por primera vez en español desde una iglesia evangélica.
Monsieur Besson, con su personalidad caritativa, su devoción misionera y sus sermones fomentando la democracia y con denuncias a la intolerancia y atropellos de la iglesia católica de la época, no tardó en fijar la atención de la sociedad porteña.
Un diario de la época escribiría sobre él :
“El señor Besson es también un publicista que no cesa de defender con la pluma los grandes principios de la libertad y del progreso.” “Poseyendo un buen argumento es un temperamento genial pero también es uno de los hombres de corazón más tierno de la ciudad.”
La fama de Don Pablo, permitió que pronto sus notas en favor de los derechos civiles fueran publicados en diarios como La Nación, La Prensa, La Razón, La Argentina, Tribuna, El Tiempo , La Libertad y especialmente El Fígaro , que respondía al general Roca , además de numerosos pequeños folletos que repartía por doquier .
Yendo un poco más allá, en 1887, Besson en su astucia y su conocimiento jurídico, con la intención de legitimar un enlace entre dos bautistas civilmente, escribe una solicitud al procurador general de la nación exponiendo argumentos legales en favor de la misma.
El procurador sorprendido por los argumentos del pastor, no sólo acepta la solicitud sino que el mismo amplía la interpretación del código civil y sienta jurisprudencia para los matrimonios fuera de la iglesia católica.
En palabras de Besson :
“En nombre de los oprimidos , de los prescriptos y de los perseguidos y sobre todo en nombre del ideal de la Constitución que nos asegura a todos lo que nos quita su falsa aplicación farisaica y jesuítica , mil gracias al Procurador General , doctor Costa”
Este hecho fue tan trascendental que logró llamar la atención de partidarios liberales y contra todo pronóstico, el ministro Posse presentó ante el congreso de la nación el proyecto de la ley de registro civil, el cual fue aprobado en 1888.
Podríamos escribir libros sobre las denuncias de las desigualdades civiles por las que luchó Pablo Besson a lo largo de su vida, pero podemos concluir que existieron pocos hombres tan firmes en los ideales republicanos, de la libertad y de el progreso como lo fue este pastor francés, que no solo adoptó Argentina como su casa sino que luchó por una mejor versión de la misma.
En honor a Pablo Besson , la iglesia bautista y todos los hombres y mujeres que lucharon por los derechos civiles en la Argentina.
Tomás Emanuel Mesías Tymoszczuk- 18 de julio de 1999
Estudiante de medicina de la universidad nacional de Córdoba. Técnico agropecuario, campeón provincial de las olimpiadas de agro 2018. Diplomado en prevención del maltrato y abuso infantil. Miembro activo de la iglesia bautista, con experiencia en trabajo social en condiciones de precariedad.
Amante del piano, el paisajismo, la historia, la teología y los caballos.